JUAN PABLO II: Es importante reservar un mayor cuidado pastoral a la promoción de la Liturgia de las Horas como oración para todo el Pueblo de Dios. Si bien los sacerdotes y los religiosos tienen el mandato preciso de celebrarla, ésta es también una cálida propuesta para los laicos. Sin embargo, sigue siendo una oración que supone una adecuada formación catequética y bíblica para que le pueda gustar hasta el fondo. Por tanto, dejaremos que nos ayuden los resultados de la exégesis, pero nos afiliaremos juntos a la escuela de la Tradición y, sobre todo, escucharemos a los Padres de la Iglesia. -Formato: 11X16.5cm - Pags: 448.
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